Juan Manuel Santos: No quiero una guerra ni con Venezuela ni con Ecuador

El candidato presidencial colombiano Juan Manuel Santos advirtió este martes que no quiere una guerra "ni con Venezuela ni con Ecuador" luego de recibir críticas de esos gobiernos por haberse declarado "orgulloso" de ordenar un ataque de su Ejército en territorio de Ecuador.

"Que quede claro. No queremos guerra ni con Venezuela ni con Ecuador", aseguró Santos -que lidera las encuestas de intención de voto para las presidenciales del próximo 30 de mayo- en un evento público en Bogotá y tras recalcar que lo único que busca con esos países es tener "buenas relaciones".

"A quienes quieren atizar un conflicto, antes de ser soldado, soy diplomático y quiero buenas relaciones con Venezuela y Ecuador", enfatizó el ex ministro de Defensa de Alvaro Uribe quien en marzo de 2008 ordenó un ataque de su Ejército a un campamento rebelde en territorio ecuatoriano. "Soy consciente que es necesario tener las mejores relaciones con nuestros vecinos y trabajaré por éstas", concluyó Santos.

El domingo, durante un debate entre presidenciables, Santos dijo estar "orgulloso" de haber ordenado la operación militar contra la guerrilla marxista FARC como ministro de Defensa (2006-2009), y defendió la necesidad de seguir actuando "con firmeza para seguir atacando a los terroristas donde estén".

Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Ecuador, Rafael Correa, rechazaron las declaraciones. Desde Caracas, Chávez calificó a Santos como "una amenaza para todos, sobre todo para Venezuela, Ecuador y Nicaragua", mientras que Correa dijo que las declaraciones podrían afectar la reanudación de nexos.

Ecuador rompió las relaciones con Colombia a raíz del ataque colombiano contra un campamento clandestino de FARC en su territorio el 1 de marzo de 2007. El ataque dejó 25 muertos, entre ellos el jefe rebelde Raúl Reyes. Los vínculos fueron restablecidos a nivel de encargados de negocios en noviembre pasado.

Mientras, Caracas congeló desde julio pasado las relaciones con Bogotá, en protesta por un acuerdo de Colombia con Estados Unidos, que le permite a militares estadounidenses utilizar siete bases colombianas para sus operaciones antinarcóticos.